EL CONTADOR DE HISTORIAS: La Prueba De Que El Amor Y La Compañía Pueden
Transformar A Niños Considerados “Irrecuperables”
Natalia Andrea Usuga Diaz.
Estudiante del programa de formación complementaria.
Escuela Normal Superior Antioqueña.
Esta película narra la historia de vida de uno de los
mejores contadores de historias en el mundo, el brasilero Roberto Carlos Ramos.
En la película se puede observar como la pobreza y necesidad de hacen que una
madre decida llevar a un internado del estado a su hijo menor, con la esperanza
de que allí se formará como médico y de que no le faltará el alimento.
Roberto ingresa al instituto para menores FEBEM a los
6 años de edad, al principio fue muy difícil la separación de su familia, pero
se fue acoplando al sitio poco a poco. Al cumplir 7 años, es cambiado de patio,
y pasa a estar con niños entre 7 y 14 años, agresivos y con malos hábitos,
empieza a cambiar su conducta, tiene un lenguaje vulgar y es agresivo; comienza
a fugarse frecuentemente del instituto en compañía de otros jóvenes. En la
calle aprende a robar, aspirar y fumar. A los 13 años en el instituto ya lo
consideraban un caso perdido.
De acuerdo a lo planteado por Vygotski, el aprendizaje
no sólo se da por lo genético, sino también en la interacción con el medio
socio-cultural. Esta influencia del contexto se ve reflejada en el desarrollo
de Roberto, pues mientras estuvo con niños inocentes de su misma edad, era
bueno y feliz; cuando fue sumergido en el mundo de los mayores, con experiencia
y vicios adquiridos, él se transformó en una réplica de ellos. Este hecho
también se puede relacionar con la teoría de Piaget, a través del proceso de
adaptación, Roberto interactúa con estos jóvenes y a partir de ello construyó
una nueva personalidad para adecuarse a su nuevo contexto.
A los 13 años de Roberto, llega al instituto una
pedagoga francesa Margherit Duvas, a realizar una investigación para verificar
su tesis de maestría, ella se interesa inmediatamente por él y trata de hablar
con él; al principio se muestra negativo, pero luego le narra una historia en
la que ella descubre el talento que él posee para narrar historias. Roberto se
muestra indiferente ante la preocupación de ella hacia él, pero ante una
situación traumática y muy triste en su vida (fue violado por 3 jóvenes al
intentar ingresar a su banda); decide buscar refugio en la casa de ella.
Margherit empieza a tener el papel de madre de
Roberto, le enseña a leer, escribir, y cambia su mundo. Se puede hablar de la
teoría organicista, en este proceso de cambio y transformación de Roberto que
se va dando al ritmo que fluyen las situaciones de conocimiento y se obtiene un
buen resultado: transformación total de Roberto. Margherit aprovecha la
habilidad narrativa de Roberto para ayudarlo en su proceso y potenciarlo.
Según la teoría de Bruner una buena enseñanza debe
producir un aprendizaje, algo que se ve reflejado en la vida de Roberto,
gracias a la ayuda de Margherit, y también se puede mencionar de Bruner los
refuerzos asociados con la motivación intrínseca hacia el aprendizaje; ejemplo
de ello en la película es cuando Margherit le lee a Roberto la historia del
capitán Nemo, y descubre que él no conoce el mar y se entusiasma mucho con esta
historia; ella lo lleva a conocer el mar y así aumenta la motivación de él.
Heráclito decía que todo fluye, algo que se ve
reflejado en la vida de Roberto, todo fluyó: lo bueno, lo malo; fue posible en
él un cambio, una nueva perspectiva de vida.
A modo de síntesis, la película muestra uno de los
factores importantes al realizar una investigación: que en su aplicación se
logré la transformación del contexto analizado, del objeto investigado; es
posible crear cambios conociendo el contexto e historia de los estudiantes,
aplicando las estrategias que más se adapten a sus necesidades.
El estudiante debe ser constructor de su conocimiento.
El medio y cultura en la que se vive es influyente y determinante en la
construcción de conocimiento, personalidad y autoconcepto.
Así como Roberto, regresa casa de su madre, quien
lavaba ropa para sostenerlo; vivía en un humilde barrio y en unas condiciones
poco óptimas; debemos interiorizar la
siguiente reflexión: por más títulos que obtengamos, nunca olvidemos de donde
somos y tratemos de cambiar todo aquello que de nuestra realidad no nos agrada.
Estefanía Calle Restrepo
El contador de historias
Esta es una historia que sinceramente deja mucho de qué hablar y no se
sabe por dónde empezar, aunque no sea fácil la situación que se vive en
la película es una cruel realidad d lo que vivimos en muchas de nuestras
escuelas.
Roberto antes de ingresar al instituto febem era un niño muy feliz al lado
de sus nueve hermanos y de su madre, pero cierto día su madre lo llevo
a aquel instituto donde habían niños abandonados por sus madres con la
esperanza de que algún día salieran con una profesión cuando en realidad
lo que conseguían eran que estos niños en el cual incluyo a Roberto se
escaparan de ese lugar para que cayeran en el mundo de la droga, el robo
y muchas cosas más; el instituto febem si es que se le puede llamar así
cuando eso se debería llamar reclusorio es un instituto que trabaja un
modelo muy tradicionalista en el cual no había ni una muestra de amor y
de afecto hacia esos niños que realmente es lo que necesitaban y que con
un acompañamiento se les puede ir enseñando y corrigiendo ya que un
niño de cualquier edad no se puede ver como incorregible, como lo veía
la directora del instituto y la psicóloga amiga de ella le comprobó todo lo
contrario al empezar hablando con Roberto y ganarse su confianza y poco a
poco Roberto fue cambiando, porque tuvo alguien al lado que lo acompañara
constantemente desde la enseñanza de lo que está bien, lo que está mal y
desde la parte de lecto - escritura y le brindo lo que le hiso falta amor.
Ya cuando Roberto creció y maduro toda su actitud, llego a su tierra natal y
visito a su madre y aquella le pregunto ¿qué decidiste ser? y con gran orgullo
dijo seré maestro.
Sin irnos tan lejos esta problemática no solo la vemos en Brasil, en nuestro
país y en muchos otros también encontramos de estos institutos donde
privan a nuestros niños de la libertad, donde hay una sanción, donde no hay
una muestra de afecto y es que no hay necesidad de que estén en instituto
porque esto mismo lo pueden hacer en la familia donde sus padres no
muestran ni el más mínimo afecto asía él.
Por eso es que a nosotros como maestros a veces nos toca hacer o tomar
el lugar de padres donde los niños nos ven como esa figura ya sea materna
o paterna que le hace falta y cuando crecen esas personas que le brindaron
esa parte que le hacía falta y se la recompensa con una grande muestra de
agradecimiento.
Para darle cierre a este texto solo pensemos una cosa ¿qué tan dispuestos
estamos para ayudar a estos niños? Y ¿qué técnicas aplicarías tú como
psicólogo o pedagogo?
Estefanía Calle Restrepo
El contador de historias
Esta es una historia que sinceramente deja mucho de qué hablar y no se
sabe por dónde empezar, aunque no sea fácil la situación que se vive en
la película es una cruel realidad d lo que vivimos en muchas de nuestras
escuelas.
Roberto antes de ingresar al instituto febem era un niño muy feliz al lado
de sus nueve hermanos y de su madre, pero cierto día su madre lo llevo
a aquel instituto donde habían niños abandonados por sus madres con la
esperanza de que algún día salieran con una profesión cuando en realidad
lo que conseguían eran que estos niños en el cual incluyo a Roberto se
escaparan de ese lugar para que cayeran en el mundo de la droga, el robo
y muchas cosas más; el instituto febem si es que se le puede llamar así
cuando eso se debería llamar reclusorio es un instituto que trabaja un
modelo muy tradicionalista en el cual no había ni una muestra de amor y
de afecto hacia esos niños que realmente es lo que necesitaban y que con
un acompañamiento se les puede ir enseñando y corrigiendo ya que un
niño de cualquier edad no se puede ver como incorregible, como lo veía
la directora del instituto y la psicóloga amiga de ella le comprobó todo lo
contrario al empezar hablando con Roberto y ganarse su confianza y poco a
poco Roberto fue cambiando, porque tuvo alguien al lado que lo acompañara
constantemente desde la enseñanza de lo que está bien, lo que está mal y
desde la parte de lecto - escritura y le brindo lo que le hiso falta amor.
Ya cuando Roberto creció y maduro toda su actitud, llego a su tierra natal y
visito a su madre y aquella le pregunto ¿qué decidiste ser? y con gran orgullo
dijo seré maestro.
Sin irnos tan lejos esta problemática no solo la vemos en Brasil, en nuestro
país y en muchos otros también encontramos de estos institutos donde
privan a nuestros niños de la libertad, donde hay una sanción, donde no hay
una muestra de afecto y es que no hay necesidad de que estén en instituto
porque esto mismo lo pueden hacer en la familia donde sus padres no
muestran ni el más mínimo afecto asía él.
Por eso es que a nosotros como maestros a veces nos toca hacer o tomar
el lugar de padres donde los niños nos ven como esa figura ya sea materna
o paterna que le hace falta y cuando crecen esas personas que le brindaron
esa parte que le hacía falta y se la recompensa con una grande muestra de
agradecimiento.
Para darle cierre a este texto solo pensemos una cosa ¿qué tan dispuestos
estamos para ayudar a estos niños? Y ¿qué técnicas aplicarías tú como
psicólogo o pedagogo?
Liliana María Pulgarín Bedoya Nivel : 4E Abril 19/2013
El
arte de enseñar con amor.
Esta película nos muestra
una historia basada en hechos reales, se trata de un niño llamado Roberto,
perteneciente a una familia de estrato socioeconómico bajo, siendo él, el menor
de diez hermanos, poseían muy pocos recursos y eran mínimas las posibilidades
que le podría brindar su madre para el futuro; así que deciden enviarlo a la
Fundación para el bienestar de la infancia (FEBEM), donde cree la madre no le
faltará nada a su hijo, saciaran todas sus necesidades y lo formarán para que
tenga un futuro exitoso y sea una persona reconocida, la madre cree no poder
brindarle una excelente formación así que le delegan la labor a la institución.
Lastimosamente no todo es
tan perfecto como ella creía que sería, Roberto se siente abandonado, el trato
que recibe por parte de sus compañeros no es el ideal y además recibe educación
de unos maestros no aptos para enseñar, son personas que quizá lo estaban
haciendo por alguna necesidad o porque debían solo cumplir. Esta institución
tenía un aspecto muy grotesco para pretender formar infantes, su planta física
parecía un reclusorio, triste y violento; tenían un modelo pedagógico muy
tradicional, los alumnos jamás recibían afecto, quizá por esto y por las malas
compañías que consiguió Roberto, logró escaparse tantas veces de la
institución, no con un fin maligno, solo con la idea de experimentar cosas nuevas,
lastimosamente cayendo en las drogas, vicios, delincuencia y sufrir a causa de
su inocencia pues muchos se aprovechaban de ella hasta abusar de él; llegó a
tal punto que fue nombrado "el irrecuperable", se había convertido en
un niño frio, sin sentimientos, inconsciente e ignorante. Un niño jamás se debe
nombrar así y mucho menos juzgarlo sin antes haber intentado comprenderlo y
buscar estrategias para que su cambio fuera positivo.
Para su beneficio una pedagoga
francesa, Margherit Duvas se interesa en él para su investigación y decide
hacer lo que sea con tal de saber un poco de este niño y trascender en su
aprendizaje.
Ella lleva un proceso en el
que va elaborando su tesis gracias a la cercanía del pequeño, pero en repetidas
ocasiones es defraudada por este; su perseverancia la llevan a poder lograr que
el niño confíe en ella y decida dejarse ayudar. El niño era analfabeta, no
sabía leer, ni escribir, no tenia modales, se comportaba de una manera vulgar y
no podía mirar a nadie a los ojos esto inculcado en la fundación, los niños
solo obedecían y por respeto a la autoridad jamás debían mirar a los ojos.
Esta pedagoga logra muchos
cambios significativos en el pequeño, se aprovecha de su imaginación, su gran
habilidad comunicativa y alcanza a formarlo tanto cognitiva como
emocionalmente, gracias a su afectividad, ella hacía sentir importante a
Roberto siempre; desde el primer momento esta fue su mayor atracción hacia
ella, poder sentirse importante, que era escuchado.
Margherit uso toda la teoría
que había aprendido para enseñarle a Roberto a construir su propio concepto de
las cosas, de su mundo exterior, a mirar la sociedad de una manera crítica y
con reflexiva.
Ella regresa a Marsella y se
lleva a Roberto, quien regresa a Brasil a la edad de 21, era muy joven y tenía
un propósito, reencontrarse con su familia y cambiar la educación que se les
brinda a los alumnos del FEBEM; utiliza el discurso como estrategia educativa y
decide ser un maestro que hace parte de la pedagogía activa.
Lo que más me cautivo de la
película es como por medio de la perseverancia, el positivismo y el querer
hacer las cosas con amor todo se puede logar, y construir ideales benévolos que
aportan un granito de arena al cambio de la educación mundial.
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